Un total de 158 millones de dólares fueron retirados de los bancos durante los periodos eleccionarios de enero y marzo de 2009, para ser depositados de nuevo pocos días después de conocerse los resultados de los comicios, según datos revelados por la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades), en el Informe Trimestral de Coyuntura, hasta marzo de 2009.
De acuerdo con las cifras obtenidas del Banco Central de Reserva (BCR), dos semanas antes de que se celebraran las elecciones municipales del 18 de enero se registró una salida de 16 millones de dólares, mientras que una semana antes se retiraron $54 millones más. Sin embargo, exactamente la suma de estas dos cantidades, 70 millones de dólares, fueron ingresados de nuevo al sistema bancario en la semana posterior a los comicios.
Del mismo modo, el 13 de marzo, dos días antes de que se eligiera el nuevo Presidente de la República, el sistema bancario registró una reducción de 27 millones de dólares en los depósitos. A esta salida se sumó el retiro de $61 millones más en los días inmediatamente posteriores a conocerse los resultados de los comicios situación que, sin embargo, se estabilizó rápidamente con el reingreso de una cantidad incluso superior de depósitos. Así, el día 27 de marzo el sistema bancario registraba de nuevo un aumento de 91 millones de dólares en la cifra total de depósitos, frente a los 88 millones que se habían retirado en semanas anteriores.
El informe de Fusades interpreta estos movimientos como "moderadas variaciones a la baja en los eventos electorales que volvieron a aumentar ante las señales de estabilidad y confianza". Pedro Argumedo, investigador de la entidad, ratificó este punto de vista. "Tras los anuncios de que habría una transición ordenada los capitales regresaron", afirmó. "Aquí tenemos una medida de que la confianza y las buenas señales fueron muy positivas para el sistema bancario y para los salvadoreños que tienen sus depósitos".
Según Argumedo, este cuadro nos presenta por un lado los temores en periodo electoral pero por otro "los premios" cuando se muestra certidumbre, porque los capitales regresaron". Por su parte, el presidente de la Asociación Bancaria Salvadoreña, Armando Arias, sostuvo que no se podía vincular el movimiento de capitales a las elecciones de alcaldes, diputados y presidenciales.
Es más, indicó que hasta el momento el panorama de toda las transacciones y actividades bancarias reportan estabilidad. "Lo que hemos visto hasta el momento es una estabilidad en los depósitos de los ahorrantes y hay fluctuaciones, pero no las podemos relacionar con un periodo electoral", aseguró el representante de la gremial bancaria.
Arias añadió incluso que los depósitos fluctúan todos los días y que "a nivel macro no es una fluctuación que preocupe y que por otro lado no sabemos que se deba al tema electoral", insistió.
"A veces con el fideicomiso de las AFP hay retiros de fondos más importantes que esos y realmente son cosas naturales. Para nosotros una corrida de fondos hubiera sido totalmente diferente a eso". El presidente de la gremial bancaria enfatizó que, a pesar de la coincidencia de fechas, no podía asegurar que los movimientos de capitales estén "vinculados con el proceso electoral", dijo.
Asimismo, explicó que, por lo general, los depósitos reportan una baja durante abril debido a que los ahorrantes utilizan el dinero para cancelar los impuestos.
Por otro lado, Arias se refirió a un detalle del informe de Fusades: "En ese informe hay una nota al pie que dice que la razón de los retiros puede haber sido por diferentes razones". Esa nota al pie especifica que "la caída de depósitos puede tener diferentes explicaciones y motivos, pero por el riesgo electoral se asocia a salida de capitales o preferencia por la liquidez".
Para Argumedo, el comportamiento de ida y vuelta de los capitales no es sino una muestra clara de que "los premios y los castigos, dependiendo de los mensajes que se den a los mercados, serán inmediatos". En este momento, según el presidente de Abansa, los depósitos son de 9 mil 700 millones de dólares, cantidad que demuestra la estabilidad en este indicador bancario.
De acuerdo con las cifras obtenidas del Banco Central de Reserva (BCR), dos semanas antes de que se celebraran las elecciones municipales del 18 de enero se registró una salida de 16 millones de dólares, mientras que una semana antes se retiraron $54 millones más. Sin embargo, exactamente la suma de estas dos cantidades, 70 millones de dólares, fueron ingresados de nuevo al sistema bancario en la semana posterior a los comicios.
Del mismo modo, el 13 de marzo, dos días antes de que se eligiera el nuevo Presidente de la República, el sistema bancario registró una reducción de 27 millones de dólares en los depósitos. A esta salida se sumó el retiro de $61 millones más en los días inmediatamente posteriores a conocerse los resultados de los comicios situación que, sin embargo, se estabilizó rápidamente con el reingreso de una cantidad incluso superior de depósitos. Así, el día 27 de marzo el sistema bancario registraba de nuevo un aumento de 91 millones de dólares en la cifra total de depósitos, frente a los 88 millones que se habían retirado en semanas anteriores.
El informe de Fusades interpreta estos movimientos como "moderadas variaciones a la baja en los eventos electorales que volvieron a aumentar ante las señales de estabilidad y confianza". Pedro Argumedo, investigador de la entidad, ratificó este punto de vista. "Tras los anuncios de que habría una transición ordenada los capitales regresaron", afirmó. "Aquí tenemos una medida de que la confianza y las buenas señales fueron muy positivas para el sistema bancario y para los salvadoreños que tienen sus depósitos".
Según Argumedo, este cuadro nos presenta por un lado los temores en periodo electoral pero por otro "los premios" cuando se muestra certidumbre, porque los capitales regresaron". Por su parte, el presidente de la Asociación Bancaria Salvadoreña, Armando Arias, sostuvo que no se podía vincular el movimiento de capitales a las elecciones de alcaldes, diputados y presidenciales.
Es más, indicó que hasta el momento el panorama de toda las transacciones y actividades bancarias reportan estabilidad. "Lo que hemos visto hasta el momento es una estabilidad en los depósitos de los ahorrantes y hay fluctuaciones, pero no las podemos relacionar con un periodo electoral", aseguró el representante de la gremial bancaria.
Arias añadió incluso que los depósitos fluctúan todos los días y que "a nivel macro no es una fluctuación que preocupe y que por otro lado no sabemos que se deba al tema electoral", insistió.
"A veces con el fideicomiso de las AFP hay retiros de fondos más importantes que esos y realmente son cosas naturales. Para nosotros una corrida de fondos hubiera sido totalmente diferente a eso". El presidente de la gremial bancaria enfatizó que, a pesar de la coincidencia de fechas, no podía asegurar que los movimientos de capitales estén "vinculados con el proceso electoral", dijo.
Asimismo, explicó que, por lo general, los depósitos reportan una baja durante abril debido a que los ahorrantes utilizan el dinero para cancelar los impuestos.
Por otro lado, Arias se refirió a un detalle del informe de Fusades: "En ese informe hay una nota al pie que dice que la razón de los retiros puede haber sido por diferentes razones". Esa nota al pie especifica que "la caída de depósitos puede tener diferentes explicaciones y motivos, pero por el riesgo electoral se asocia a salida de capitales o preferencia por la liquidez".
Para Argumedo, el comportamiento de ida y vuelta de los capitales no es sino una muestra clara de que "los premios y los castigos, dependiendo de los mensajes que se den a los mercados, serán inmediatos". En este momento, según el presidente de Abansa, los depósitos son de 9 mil 700 millones de dólares, cantidad que demuestra la estabilidad en este indicador bancario.
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