Casualmente la semana pasada se dio en Ginebra, Suiza, una nueva reunión entre los países miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC), en donde las cosas parece que no han marchado mal pero tampoco es que han estado del todo bien….entonces, navegando por el internet el día de ayer me encontré una nota que su titular señala que el “aumento del comercio mundial depende de los gobiernos individuales”, lo cual obviamente me invitó a leerlo y saber cual era su punto de vista.
Según la noticia, las medidas unilaterales para reducir el tiempo y costos necesarios para enviar productos a través de las fronteras internacionales provocarían un aumento del comercio mundial. De acuerdo con un economista en el Instituto Cato, y un abogado mercantil de Washington, destacan que para facilitar el comercio es necesario reducir las barreras administrativas y logísticas que hacen lento el envío de productos que cruzan las fronteras internacionales, según estos expertos, dicho tema no ha recibido la atención que se merece y de hacerse, incrementaría el comercio mundial más que con una reducción de aranceles en este momento.
Por ejemplo, para regar un jardín se necesita de una manguera, pero hay que “abrir el agua”, es decir, reducir los aranceles, “abrir la llave al máximo”, es tener cero aranceles, pero si la manguera está enrollada y enredada, el agua no va a fluir. Para facilitar el comercio es necesario desenredar esa manguera, es algo tan importante, si no más, que liberalizar los aranceles.
Las reducciones de aranceles se producen por medio de acuerdos bilaterales y multilaterales, y son la esencia del trabajo de la Organización Mundial del Comercio (OMC). Las medidas para facilitar el comercio tal como acelerar los procedimientos aduaneros y hacer que los envíos sean expeditos, se pueden tomar sin tener en cuenta las prácticas en otros países. En ese sentido, las acciones unilaterales colocan poder en manos de cada país para hacer lo que necesite según su propio interés. Los negociadores en Ginebra, la sede de la OMC, y las burocracias comerciales en Washington, Bruselas y en otros lugares, cumplen con su trabajo, pero no se tiene que depender de ellos.
En el desarrollo de la noticia se coloca un ejemplo sobre un exportador de pescado de Yemen, el cual debido a los procedimientos de exportación que exige el Gobierno de Yemen le hace perder negocios, pues le toma en promedio33 días el poder exportar desde Yemen, eso le cuesta alrededor de siete millones de dólares al año.
Si se logra reducir el tiempo en el envío de los productos, el comercio internacional aumenta al menos un uno por ciento. Para productos que tienen un período de caducidad como las fresas o las flores, este aumento del comercio podría ser de hasta un 7 por ciento. El comercio estadounidense escalaría por valor de $29,000 millones de dólares al año como resultado de una reducción de un día del tiempo de tránsito, según los datos del Banco Mundial. Esta cantidad excede en casi 50 por ciento el aumento de los $20,000 millones de dólares de comercio internacional que se espera que se produzca a causa del Acuerdo de Libre Comercio entre Estados Unidos y Corea.
Aunque los beneficios de facilitar el comercio son destacables para Estados Unidos, estos son mucho mayores para los países en desarrollo, en donde los costes de flete son más altos y los tiempos de tránsito más largos. Por ejemplo, un camionero que cruce la frontera entre Uzbekistán y Tayikistán debe presentar 70 documentos, múltiples firmas y de $1,500 a $2,000 dólares en pagos “extraoficiales”. El tiempo entre el pedido y la entrega para estos dos vecinos de Asia Central es de 186 días. La policía local establece puntos de control extraoficiales en los que extorsionan a los camioneros exigiendo pagos, además les cobran cargos ilegales por ofrecer escoltas extraoficiales de la policía.
La tarea parece que tiene que centrarse en gran medida en modernizar aduanas y sistemas comerciales. En algunos países donde los funcionarios de aduanas reciben un salario muy pobre o inexistente, estos funcionarios asignan una “tarifa de usuario” para los transportistas que cruzan las fronteras. Si los transportistas desean que sus productos se muevan, pagan la tarifa. Si desean esperar un par de semanas, también es posible, no tienen que pagar la tarifa, pero esperarán durante mucho tiempo.
Si se comparan dos países que están penetrando la red de comercio mundial para desarrollar sus economías, China y Camboya, la disparidad en las prácticas que facilitan el comercio en los dos países explica por qué Camboya no puede competir con China en la industria textil. La industria textil de Camboya es primordialmente de propiedad y gestión china, la misma gente que está en China. Los trabajadores camboyanos son igual de productivos que los chinos y se les paga menos, ¿por qué no puede Camboya competir con China?.
La respuesta radica en el menor tiempo y costos más bajos de los procedimientos de exportación de China. En Camboya, se tarda 37 días y hacen falta 722 dólares para pasar un contenedor de ropa por el proceso de exportación. En China, 21 días y 390 dólares.
En conclusión, la noticia señala que los gobiernos individuales, las empresas y otras partes interesadas son los actores claves para mejorar la forma de facilitar el comercio, al tiempo que las negociaciones comerciales mundiales tienen un papel lateral para llevar a cabo las mejoras.
Desde mi punto de vista el tema de la facilitación comercial es un elemento sumamente importante para mejorar el comercio mundial, pero no es lo único pues también es necesario contar con un marco multilateral adecuado que permita a los países sin importar su tamaño o nivel de desarrollo que puedan estar respaldados y contar con un ambiente estable y predecible en el tiempo.
Según la noticia, las medidas unilaterales para reducir el tiempo y costos necesarios para enviar productos a través de las fronteras internacionales provocarían un aumento del comercio mundial. De acuerdo con un economista en el Instituto Cato, y un abogado mercantil de Washington, destacan que para facilitar el comercio es necesario reducir las barreras administrativas y logísticas que hacen lento el envío de productos que cruzan las fronteras internacionales, según estos expertos, dicho tema no ha recibido la atención que se merece y de hacerse, incrementaría el comercio mundial más que con una reducción de aranceles en este momento.
Por ejemplo, para regar un jardín se necesita de una manguera, pero hay que “abrir el agua”, es decir, reducir los aranceles, “abrir la llave al máximo”, es tener cero aranceles, pero si la manguera está enrollada y enredada, el agua no va a fluir. Para facilitar el comercio es necesario desenredar esa manguera, es algo tan importante, si no más, que liberalizar los aranceles.
Las reducciones de aranceles se producen por medio de acuerdos bilaterales y multilaterales, y son la esencia del trabajo de la Organización Mundial del Comercio (OMC). Las medidas para facilitar el comercio tal como acelerar los procedimientos aduaneros y hacer que los envíos sean expeditos, se pueden tomar sin tener en cuenta las prácticas en otros países. En ese sentido, las acciones unilaterales colocan poder en manos de cada país para hacer lo que necesite según su propio interés. Los negociadores en Ginebra, la sede de la OMC, y las burocracias comerciales en Washington, Bruselas y en otros lugares, cumplen con su trabajo, pero no se tiene que depender de ellos.
En el desarrollo de la noticia se coloca un ejemplo sobre un exportador de pescado de Yemen, el cual debido a los procedimientos de exportación que exige el Gobierno de Yemen le hace perder negocios, pues le toma en promedio33 días el poder exportar desde Yemen, eso le cuesta alrededor de siete millones de dólares al año.
Si se logra reducir el tiempo en el envío de los productos, el comercio internacional aumenta al menos un uno por ciento. Para productos que tienen un período de caducidad como las fresas o las flores, este aumento del comercio podría ser de hasta un 7 por ciento. El comercio estadounidense escalaría por valor de $29,000 millones de dólares al año como resultado de una reducción de un día del tiempo de tránsito, según los datos del Banco Mundial. Esta cantidad excede en casi 50 por ciento el aumento de los $20,000 millones de dólares de comercio internacional que se espera que se produzca a causa del Acuerdo de Libre Comercio entre Estados Unidos y Corea.
Aunque los beneficios de facilitar el comercio son destacables para Estados Unidos, estos son mucho mayores para los países en desarrollo, en donde los costes de flete son más altos y los tiempos de tránsito más largos. Por ejemplo, un camionero que cruce la frontera entre Uzbekistán y Tayikistán debe presentar 70 documentos, múltiples firmas y de $1,500 a $2,000 dólares en pagos “extraoficiales”. El tiempo entre el pedido y la entrega para estos dos vecinos de Asia Central es de 186 días. La policía local establece puntos de control extraoficiales en los que extorsionan a los camioneros exigiendo pagos, además les cobran cargos ilegales por ofrecer escoltas extraoficiales de la policía.
La tarea parece que tiene que centrarse en gran medida en modernizar aduanas y sistemas comerciales. En algunos países donde los funcionarios de aduanas reciben un salario muy pobre o inexistente, estos funcionarios asignan una “tarifa de usuario” para los transportistas que cruzan las fronteras. Si los transportistas desean que sus productos se muevan, pagan la tarifa. Si desean esperar un par de semanas, también es posible, no tienen que pagar la tarifa, pero esperarán durante mucho tiempo.
Si se comparan dos países que están penetrando la red de comercio mundial para desarrollar sus economías, China y Camboya, la disparidad en las prácticas que facilitan el comercio en los dos países explica por qué Camboya no puede competir con China en la industria textil. La industria textil de Camboya es primordialmente de propiedad y gestión china, la misma gente que está en China. Los trabajadores camboyanos son igual de productivos que los chinos y se les paga menos, ¿por qué no puede Camboya competir con China?.
La respuesta radica en el menor tiempo y costos más bajos de los procedimientos de exportación de China. En Camboya, se tarda 37 días y hacen falta 722 dólares para pasar un contenedor de ropa por el proceso de exportación. En China, 21 días y 390 dólares.
En conclusión, la noticia señala que los gobiernos individuales, las empresas y otras partes interesadas son los actores claves para mejorar la forma de facilitar el comercio, al tiempo que las negociaciones comerciales mundiales tienen un papel lateral para llevar a cabo las mejoras.
Desde mi punto de vista el tema de la facilitación comercial es un elemento sumamente importante para mejorar el comercio mundial, pero no es lo único pues también es necesario contar con un marco multilateral adecuado que permita a los países sin importar su tamaño o nivel de desarrollo que puedan estar respaldados y contar con un ambiente estable y predecible en el tiempo.
Al final la pregunta sobre que debe prevalecer, si medidas multilaterales o unilaterales, creo que no hay una respuesta única, pues habrán muchos que opinen que unas son mejores que las otras, pero para mi es necesario un marco multilateral amplio y desde él tomar las medidas necesarias para complementarlo. Quizas no es que necesitemos un acuerdo multilateral, tal vez sólo sea de contar con un marco regional adecuado desde el cual se "reglamente" nuestra relación con los principales socios comerciales y de allí derivar las medidas unilaterales que necesitemos.
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