La del Apertura 2005 fue una final histórica para el fútbol salvadoreño. Isidro Metapán y Vista Hermosa eran debutantes en esas fechas, por lo que el equipo que se coronara esa tarde, sería rey inédito del balompié cuscatleco. El premio fue para los correcaminos. Desde entonces, siempre hubo al menos un grande ocupando al menos una de las plazas, como aspirantes al título. Sin embargo ahora los llamados equipos grandes como Águila, FAS, Firpo y Alianza duermen el sueño de los justos.
Emplumados y tigrillos cobraron la afrenta de caleros y correcaminos de ese Apertura. Se midieron en el partido decisivo de Clausura 2006 y tocó llevarse el trofeo a oriente. Las siguientes dos finales fueron auténticos duelos que fueron catalogados como “David contra Goliat”: Once Municipal ante FAS e Isidro Metapán contra Firpo. Y en ambos venció David. Primero con los canarios haciéndose de la segunda corona de su historia y después con los caleros venciendo también a los toros, alargando la espera de estos por su octava corona.
Pero ya estaba cerca. Por partida doble. En el último año, Firpo y FAS definieron ambas finales con el mismo resultado: celebración pampera y frustración tigrilla. Pero en este torneo no estará ninguno de ellos, ni de los otros dos. Al Alianza y al Firpo la oportunidad se les acabó tras las 18 jornadas, hundidos cada uno en sus crisis internas; Águila, incapaz de remontarle al Chalatenango; y FAS, sufriendo con una remontada que creyeron imposible en el mismísimo Óscar Quiteño a manos de Metapán.
Emplumados y tigrillos cobraron la afrenta de caleros y correcaminos de ese Apertura. Se midieron en el partido decisivo de Clausura 2006 y tocó llevarse el trofeo a oriente. Las siguientes dos finales fueron auténticos duelos que fueron catalogados como “David contra Goliat”: Once Municipal ante FAS e Isidro Metapán contra Firpo. Y en ambos venció David. Primero con los canarios haciéndose de la segunda corona de su historia y después con los caleros venciendo también a los toros, alargando la espera de estos por su octava corona.
Pero ya estaba cerca. Por partida doble. En el último año, Firpo y FAS definieron ambas finales con el mismo resultado: celebración pampera y frustración tigrilla. Pero en este torneo no estará ninguno de ellos, ni de los otros dos. Al Alianza y al Firpo la oportunidad se les acabó tras las 18 jornadas, hundidos cada uno en sus crisis internas; Águila, incapaz de remontarle al Chalatenango; y FAS, sufriendo con una remontada que creyeron imposible en el mismísimo Óscar Quiteño a manos de Metapán.
Si las fechas no me fallan, el próximo fin de semana será la gran final del futbol salvadoreño en donde Metapán y Chalatenango se enfrentarán por la conquista de la corona del balonpie nacional...quién ganará?
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